Aprovecharemos este día completo en Kabul para sumergirnos en su historia y su cultura. Exploraremos algunos de sus lugares más representativos, recorriendo bazares y mezquitas. Además, visitaremos el espectacular cementerio al lado de la mezquita de Rawza Sakhi Shah-e, donde encontraremos a personas del grupo étnico hazara, la minoría chiita del país. A la tarde, visitaremos a Habib, último fotógrafo callejero de Kabul, que toma sus imágenes con una cámara minutera. Quien quiera podrá llevarse un inolvidable recuerdo posando para este gran artista.

Saldremos temprano de Kabul en dirección a Kandahar, disfrutando de un recorrido en el que encontraremos pueblos tradicionales afganos con casas hechas de barro y adobe. Nos detendremos para almorzar y, si tenemos suerte, conoceremos a algunos miembros de los pueblos nómadas que viven en esta zona. Este país, al haberse abierto al turismo hace apenas tres años, acoge al extranjero con curiosidad, miradas de extrañeza, y también mucha hospitalidad. Por el camino podremos observar los desafíos y la falta de infraestructuras dejadas por la guerra; nos veremos obligados a sortear los caminos destruídos tomando carreteras secundarias, lo que hará que tardemos más de lo normal en llegar a nuestro destino.

Día completo para recorrer la ciudad de Kandahar, llamada por algunos medios “el bastión de los talibanes”. En esta ciudad habrá que extremar la etiqueta, ya que sus habitantes son seguidores de las facciones más radicales del islam. Visitaremos la icónica Mezquita del Manto del Profeta Mahoma, la tumba de Ahmed Shah Durrani, la tumba de Mirwais Khan Hotak y el complejo de Chilzina, finalizando con un paseo por el antiguo bazar de la ciudad, donde conoceremos mejor la vida local y el ambiente de Kandahar.

Nos levantaremos temprano para emprender el viaje hacia Herat, haciendo paradas en diferentes aldeas y casas locales a lo largo del camino. Nos detendremos para almorzar y disfrutar de los paisajes. Llegaremos a la noche a Herat.

Durante el día de hoy recorreremos las calles de Herat, una de las joyas históricas de Afganistán. Comenzaremos en la Ciudadela de Alejandro Magno, recorreremos el casco antiguo y visitaremos la Gran Mezquita, el complejo Musallah y el Santuario de Khwaja Abdullah Ansari. Durante todo este día disfrutaremos de la hospitalidad de los afganos, estando abiertos a cualquier oportunidad que tengamos para tomar un té con ellos y tener conversaciones sobre su país, su modo de vida y su cultura.

Volaremos de regreso a Kabul y, si el horario lo permite, partiremos directamente hacia Bamyan para comenzar a explorar la zona este del país al día siguiente. Durante los próximos días visitaremos el complejo en Bamyan, las ruinas de la Ciudad de Gholghula y el Valle del Dragón (Dara e Azhder). Aquí, nos encontraremos con muchas personas de la etnia hazara y aprenderemos más sobre su situación actual. En el mercado de la ciudad veremos una curiosa particularidad: mujeres encargadas de las tiendas. Será un buen momento para comprar regalos y souvenirs. Bamyan es sin duda uno de los lugares más bonitos de esta zona del mundo.
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Al día siguiente nos dirigiremos hacia las cuevas que plagan las montañas de la región para reunirnos con algunos de los grupos étnicos que construyen sus viviendas allí. Escucharemos sus historias, aprenderemos sobre su estilo de vida y compartiremos con ellos tanto tiempo como nos sea posible. A la noche volveremos a nuestro hotel en Bamyan.

A primera hora partiremos hacia Chilburj, donde pasaremos el día sumergidos en la vida rural afgana. Almorzaremos con personas locales, que nos invitarán a participar en algunas de sus actividades cotidianas, como hornear pan y ordeñar vacas. Estos pueblos, al haber tenido muy poco contacto con culturas extranjeras conservan de manera única la esencia de sus tradiciones milenarias,

Saldremos temprano en dirección a Kabul en un viaje por carretera que nos permitirá disfrutar de los paisajes montañosos de la región. Llegaremos a Kabul al caer la tarde y saldremos a tomar una última (y maravillosa) cena donde disfrutaremos recordando todo lo que hemos vivido y aprendido en este país. Al día siguiente nos despediremos entre abrazos llevándonos con nosotros un maravilloso recuerdo de este increíble país ¡Hasta la próxima aventura!